Por: Misraim Olea
El pasado 30 de septiembre rindieron protesta las nuevas autoridades municipales en 79 alcaldías del estado de Guerrero. Esto marca un nuevo comienzo para los ayuntamientos y un reto para quienes por primera vez encabezarán un gobierno local.
Atrás quedaron las propuestas y las críticas que se hicieron a las administraciones salientes, hoy los alcaldes y alcaldesas tienen la oportunidad de sacar adelante a sus municipios.
Acapulco y Chilpancingo son municipios que al final de la administración presentaron los mayores problemas, mismos que fueron heredados a Abelina López y Norma Otilia Hernández, respectivamente. El principal reto de estos municipios es el financiero, que repercute directamente en los servicios públicos; agua, recolección de basura, alumbrado público y el mantenimiento de la ciudad.
En el caso de Abelina López tiene en frente una ciudad convertida en un basurero; los efectos negativos de la falta de planeación en la administración de Adela Román se dejaron sentir con mayor fuerza estos últimos días. Calles cerradas, destruidas, obras de las que no se conoce el proyecto y basura en toda la ciudad es lo primero que se tendría que atender.
En Chilpancingo no es mínima la problemática; la falta de agua, el saneamiento de las finanzas, la baja recaudación y el pago a las y los trabajadores del ayuntamiento son situaciones que por meses paralizaron las labores de la cabecera municipal y aunque la alcaldesa este llena de buena voluntad, si la Federación o el gobierno entrante de Morena no les apoyan económicamente, difícilmente podrán hacer frente.
Abelina y Norma Otilia de a poco va trazando su ruta, ambas de manera mediática, mientras una barría una calle y dejaba toneladas de basura en cientos de calles más, la otra acompañaba a los recolectores de basura, para conocer las rutas.
Los problemas de la capital y del municipio más importante de Guerrero requieren de acciones que resuelvan en lo inmediato y ayuden al largo plazo. La improvisación no es opción en estos momentos, recordemos que fue la improvisación la que nos ha puesto en esta situación.
Vienen los días más intensos de las nuevas administraciones, los primeros, en los que su gobernar tomará forma, sentido y ruta.