Por: Jesus Garibay
Eduardo Neri.- A la intemperie, sin agua, sin energía eléctrica, ni baños y con pizarrones improvisados, es como alumnos de la primaria, Raúl Isidro Burgos y de la telesecundaria Francisco González Bocanegra, de la comunidad de Nuevo Balsamar del municipio de Eduardo Neri, asisten a clases, por lo que exigieron se les construyan sus escuelas y se les doten de los servicios necesarios para toda la comunidad.
Después de los fenómenos meteorológicos Ingrid y Manuel en el 2013, la comunidad de Balsamar en el municipio de Leonardo Bravo, fue reubicada al municipio de Eduardo Neri, ahí se les construyeron sus casas por parte del gobierno federal, sin embargo, no están terminadas y carecen de agua potable, drenaje y energía eléctrica, por lo únicamente están habitadas 80 viviendas de las 210 que se construyeron.
Pese a estas carencias, los habitantes han instalado espacios provisionales y solicitaron una casa prestada, para que los niños, niñas y adolescentes, asistan a clases, pero estos espacios carecen de mobiliario, material didáctico, baños, pisos y en el caso de la primaria, un espacio digno, puesto que carecen de infraestructura, y unas láminas sostenidas por troncos de madera es el techado rústico, donde asisten 51 alumnos atendidos por tres docentes.
El profesor Miguel Ángel Barrera de la primaria, Raúl Isidro Burgos, quien está a cargo de la dirección de esta escuela, detalló que desde su llegada a la comunidad han visto las carencias que tienen los alumnos y que han sido los padres de familia, mediante cooperaciones y gestiones, quienes lograron levantar el techo de lámina donde atienden a los alumnos.
Además, dijo que han solicitado el apoyo de la alcaldesa de Eduardo Neri, Sara Salinas Bravo, pero no han tenido ninguna respuesta favorable y quien los ha apoyado es el diputado federal Carlos Sánchez Barrios, pero únicamente ha sido con láminas, pero aún hay demasiadas carencias en la primaria.
Refirió que han hecho las peticiones correspondientes ante el Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa (IGIFE) y con el titular de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), Marcial Rodríguez Saldaña, quien ha visitado la comunidad y le han solicitado la construcción de la escuela, pero no tienen ninguna respuesta favorable.
Detalló que hubo un acuerdo entre el jardín de niños, la primaria y la telesecundaria, para la construcción del jardín de niños en el 2022, para el 2023 la primaria y para 2024 la telesecundaria, añadió que el año pasado si se construyó el jardín de niños, pero que de los dos salones que se prometieron solo se construyó uno, sin embargo, en enero de este año las autoridades educativas, les notificaron que la primaria quedó fuera de las obras.
En la parte superior de la comunidad, se encuentra la telesecundaria Francisco González Bocanegra, donde están inscritos 41 estudiantes atendidos por tres docentes, pero en ocasiones no todos los adolescentes van a clases, porque tienen que apoyar a sus padres en las labores del campo en el Balsamar en Leonardo Bravo, donde muchos tienen sus tierras de labor.
Antonio Salazar López, director de la telesecundaria, declaró que desde hace dos años obtuvieron las claves para la telesecundaria, pero lamentó que no tienen un espacio propio para los alumnos, puesto que el lugar que ocupan es una construcción prestada, la cual no tiene drenaje y para solventar la necesidad de los sanitarios, ocupan fosas sépticas y el agua tiene que ser por acarreo, porque tampoco tiene el suministro de agua.
Agregó que tampoco cuentan con mobiliario como butacas, mesas, televisores, ni material didáctico para los alumnos, sin embargo, con recursos de los padres de familia, han adquirido lo poco que tiene en la escuela, para que los alumnos puedan tomar clases y refirió que las autoridades les han dicho que van a construir la escuela y les darán todo el equipamiento correspondiente, pero no tienen ninguna fecha para que esto suceda.
Mientras tanto, los docentes imparten clases en áreas que han acondicionado, para que los alumnos hagan sus actividades deportivas y les proporcionan algunos materiales para que puedan hacer sus trabajos escolares, ya que los alumnos no tienen los recursos suficientes y tampoco tienen un lugar cercano donde adquirir materiales académicos.
Por todo lo anterior, hicieron un llamado a las autoridades estatales y federales, para atender las necesidades de la comunidad de Nuevo Balsamar de 150 habitantes, que desde 2018 fueron reubicados y no tienen servicios ni tampoco escuelas para los alumnos.