Acapulco.– La diputada Julieta Fernández Márquez propuso un punto de acuerdo desde la tribuna del Congreso del Estado de Guerrero para exhortar a los responsables de la construcción del hospital de tercer nivel del ISSSTE a que valoren los puntos positivos y negativos de la edificación del nosocomio en el Centro Internacional Acapulco.
Explicó que en el caso específico del Estado de Guerrero, existe también información oficial, que señala que en los últimos años el porcentaje de personas que no tienen servicios de salud se ha incrementado considerablemente y pasó de 13.8 por ciento a 57.7 por ciento en los últimos años, esto significa que de 428 mil personas que no tenían acceso a la salud, se incrementó a 1.9 millones de personas.
Por ello dijo que es lamentable que nuestra entidad, se encuentra entre los tres estados más con mayor pobreza de la República Mexicana y que la falta de una infraestructura hospitalaria y la falta de medicamentos en todas las instituciones que integran el sistema estatal de salud, sea un problema real que se presenta todos los días, lo que ha ocasionado que muchos de nuestros hermanos guerrerenses y familiares, cuando han padecido alguna enfermedad, tengan que ser referidos o enviados para su atención médica a otros estados de la República Mexicana o la Ciudad de México.
La legisladora local, detalló que esta situación refleja la realidad que se vive en Guerrero, por ello sería egoísta, el no valorar la determinación del Gobierno Federal por hacer justicia a nuestro Estado, al autorizar la construcción de un hospital de tercer nivel con 250 camas para el ISSSTE en Acapulco.
Ante este planteamiento, Fernández Márquez ratificó que es importante, que las autoridades responsables del proyecto, incluyendo la Secretaría de Turismo del Gobierno Federal, el Gobierno del Estado y el propio Ayuntamiento de Acapulco, en el ámbito de sus respectivas competencias, realicen un diagnóstico real, que les permita valorar el impacto negativo, que puede traer para la principal actividad económica del Estado, la construcción de dicho hospital en el corazón de la zona turística del Municipio de Acapulco, utilizado para ello, parte de lo que es la infraestructura turística del puerto, como lo es el Centro Internacional Acapulco.
En su participación desde la tribuna, dijo que el Centro Internacional Acapulco, en cuyas instalaciones se pretende construir el nuevo hospital del ISSSTE, es un lugar emblemático del turismo guerrerense y forma parte importante de la poca infraestructura turística que le sigue dando vida a la actividad económica de la zona donde está ubicado, por lo que no puede quedarse callada y permitir que Acapulco se siga rezagando en comparación con otros destinos turísticos, como ha ocurrido en los últimos años por la falta de visión e inversiones en este sector y el permanente cierre de negocios y que, aun así, sigamos terminado con la poca infraestructura turística que queda.
Puntualizó que es momento de darnos cuenta que el ubicar un hospital en donde no se ha hecho la planeación urbana necesaria para recibirlo, generará caos, degeneración del entorno aledaño, depreciación de casas y comercios que están cerca de ahí, ambulantaje y, en resumen, desorden para todas y todos.
“No estoy en contra del nuevo hospital, al contrario. Pero lo que no queremos para los guerrerenses es un hospital a costa de nuestro entorno y nuestro motor económico” apuntó.
Finalmente aseguró que la mejor opción, para todas y todos los actores, pero sobre todo para la ciudadanía, es, por un lado, rescatar el Centro de Convenciones y así generar crecimiento económico con un plan que involucre la sostenibilidad ambiental y social de la rehabilitación, y por el otro, la construcción del nuevo Hospital fuera de la mancha urbana principal, ya que con ello se detonaría un nuevo modo de crecimiento económico para la ciudad, con una planeación de usos de suelo y construcción de nuevas casas, centros comerciales y vialidades de manera ordenada.