Acapulco.- Autoridades de los tres niveles de gobierno obligaron a trabajadores informales a respetar los acuerdos sanitarios en la franja de arena de las playas, donde retiraron este viernes mobiliario que instalaron en desacato a las medidas oficiales establecidas para evitar más contagios de COVID-19.
Trabajadores municipales y federales con apoyo del Grupo de Coordinación para la Construcción de la Paz, dialogaron con grupos de personas dedicadas a la renta de toldos, sillas y mesas en las playas de Caleta y Caletilla, para concientizarlos sobre los riesgos de contagios en lugares con aglomeraciones y por ello se estableció la prohibición de instalar mobiliario.
Personal del Centro de Atención y Protección al Turista en Acapulco (CAPTA), Vía Pública, Protección Civil y de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), retiraron a trabajadores informales que rentan mobiliario y a vendedores de alimentos que invadieron la franja de arena, quienes no acataban las medidas establecidas en el protocolo sanitario.
Jondalar Castillo Ledezma, director de CAPTA, indicó que la vigilancia que se realiza en playas con apoyo de la Marina-Armada de México y Guarda Nacional, forma parte de los acuerdos establecidos en la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz, en la reapertura de actividades en fase naranja.
El funcionario destacó que dentro de los lineamientos acordados por los tres niveles de gobierno en conjunto con dirigentes y prestadores de servicios, en la reapertura de playas no se debe rentar mobiliario, vender o consumir alimentos ni bebidas embriagantes.
“Esta es una gran oportunidad de eliminar la contaminación visual y reorganizar las playas para devolverles su belleza natural”, comentó Castillo Ledezma e hizo hincapié en que el mobiliario viejo que invadía las playas genera un mal aspecto y denigra la imagen turística de Acapulco.
